viernes, 7 de diciembre de 2012

Dichos de mi madre

Hoy viernes de velitas visité a mamá y siempre que la escucho corro a la biblioteca de papá a buscar el diccionario.
Sus palabras son las mismas que intentaba descifrar cuando niño. Pese a todas las actualizaciones que ha sufrido el diccionario de la Real Academia Española esas palabras aún no aparecen. Desde que me casé he extrañado no poder visitarla a diario. Su "timbre" de voz es alto pero da gusto oírla. Dice lo que quiere. Sin "plebedad".

Había puesto un pie en la terraza de su casa y ella fue quien me saludó con un grito desde la cocina y yo... con la cabeza "sampada" en el celular... me dijo: Oye suelta ese aparato, estás en tu "yeré" (no sé si ponerla con doble Ll pues no la encuentro en la RAE.

Luego adentro, ya después de estamparle un beso en la mejilla y de contarme que se sentía con "maluqueras" le pregunté por mi padre. "Tú sabes que hoy es viernes cultural, debe estar alzando el codo con los compadres", anotó con ese suspiro de una rabia que no pasa de ahí. Pues lo que cocina es para él cuando venga "peao".

Pasamos a la sala y me pide que le alcance un "talambuco en el ceibó". El ceibó está cerca de la "butaca" en la que me acostaban cuando bebé, pero con un vestido nuevo.

"Papa con cuidao, cuidao haces un daño", dijo al ver que casi parto con el talambuco a lo que ella llama "un foco e mano".

Hecho el favor y sentados ambos en la butaca, me cuenta que está cansada y que "hay un ropero" esperándola en el patio.

Y mientras se presiona la canilla con los dedos añade: "Mira estoy también como abotigada". Le pregunto por la vida de un amigo de infancia que vivía en el barrio. "Que yo sepa no sé, nosequiensita me dijo que anda quedao, como abobinchao, dizque está cogiendo carretera no sé, lo que yo te diga es mentira". Cambio de tema, hablamos del embarazo de mi mujer y para ver una de sus viejas reacciones le digo que yo quería que fueran trillizos: "No tienes oreja y andas buscando arito", apuntó de inmediato.

El almuerzo está listo. "Papa vas a comer", me pregunta y al tiempo afirma como sabiendo que no la voy a "despreciar".
Me sirve un "platao" de sopa con "ñervito" incluido. No voy ni por la mitad cuando añade: "¿Quieres más? Y sin yo responderle "allá va" el otro cucharón repleto pal plato.
"Mijo es que te veo como revijío y creí que te había echado una criquita de na". Para no llevarme mi torcida de ojo, prefiero comer todo. Al terminar, casi sin poder respirar recibo otra pregunta. "¿Mijo no quedaste gazuso". Ella misma respondió por mí... "Ya te vas jactico pa tu casa... en la noche te comes una "bobadita" antes de acostarte.
Tenía que comérmelo todo porque si encuentra siquiera alguna "migaja", enseguida replica: bueno "la despreciada no soy yo". Para despedirme le estampo otro beso y me le robo una frase para agradecerle el almuerzo y llevarme su carcajada. "Bueno mami chao, tú sabes que cualquier cosa (el tronco de almuerzo) es cariño". Así que "de todas maneras gracias".

Al salir llegué a la esquina y saqué una "ceroscopia" de un documento que necesitaba".

Ya entrada la noche, más reposado en el apartamento... Me comí un "crobasán" (cruasán) antes de dormir.

Fue apenas un almuerzo con mi madre querida. En este blog crearé su propio diccionario, antes tengo que visitar a mi abuela.

Eres un "bellaco", diría mi papá si lee esto.

martes, 29 de mayo de 2012

Madre sólo hay una



Después de 5 años de estar viendo diariamente noticias judiciales -muchas de ellas sucesos en los que terminaban muchachos muertos en peleas de pandillas- por primera vez una madre admite que su hijo era pandillero.
Cuando el periodista llegaba a la casa de los familiares de la víctima, las frases eran repetitivas: “Mi hijo no tenía problemas con nadie, no tenía amenazas, era un pelao sano”. Y la que no faltaba, con esto no quiero decir que no era cierto en algunos casos: “Mi hijo iba caminando para su casa y se encontró con la pelea en la que nada tenía que ver y le dieron el balazo que lo mató”. “Fue a comprar el desayuno de los hijos a la tienda y cayó en la pelea”. Siempre que había un muerto en pandillas, el muerto no era pandillero… hasta ayer, cuando el redactor judicial llegó a la casa y la madre del muerto le dijo al periodista: “Ay mijo, qué me vienes a preguntar, mi hijo era pandillero, tengo que resignarme pero se lo buscó”.
A esa madre que aconsejó por varios años a su hijo para que se saliera de la delincuencia, mi más sincero respeto.
Sin duda eso es lo que falta para que no sigan creciendo las pandillas en la ciudad. Madres valientes, esas que no esconden a sus hijos en las casas cuando son perseguidos por la policía después de cometer un crimen. El hijo de esta señora estuvo preso, y el amor de madre alcanzó para volverlo a recibir en la casa hasta que enderezara el camino pero no, ella luchó sola, sin la ayuda de los policías que llevan sancochos a pandilleros para supuestamente crear una buena relación entre varios bandos y que una vez se terminan las sopas, vuelven a pelear.
Una madre, sin la ayuda de los supuestos pastores cristianos que el alcalde Campo Elías prometió en su campaña, esos que al parecer van a trabajar por estos muchachos.
Las madres conocen a sus hijos, a veces se les salen de las manos… pero no del corazón. Y ella, con la frente en alto, reconoce que se le fue aquel a quien le dio la vida, aquel a quien aconsejó, aquel que decidió no escucharla, especialmente en el mes de las madres.

lunes, 28 de mayo de 2012

Así como acusan a Sigifredo, bueno así




La portada de Q’hubo de hoy muestra una escena reprochable. Un policía de Cartagena vio que un aficionado, que acababa de salir del partido entre Real y Atlético Nacional, sacó su celular para tomar fotos de los disturbios que se presentaron a las afueras del estadio. El policía sin pensarlo dos veces se bajó de la moto, y al estilo de Jackie Chan, le lanzó una patada voladora que aterrizó cerca del miembro viril del joven.
El aficionado explicó que no le estaba tomando fotos sino que recibía la llamada de una compañera, pero y si le estaba tomando fotos ¿qué?
¿Qué estaría en realidad haciendo el policía que no dudó en atacar a aquel hombre que supuestamente le tomó fotos cuando atendía los disturbios?
Lo peor, es que después de darle la patada, otros uniformados y hasta un miembro del Esmad (Escuadrón Móvil Antidisturbios) se le acercan y lo agreden hasta quitarle el celular.
El aficionado, como se ve en las fotos, nunca quiso atacar a nadie. Es más, suplicó que no se le llevaran la Sim Card, que ahí tenía información importante, y como dice el afectado, se la tiraron en la cara y se largaron con el aparato.
Ahora, el mismo General dijo que el afectado podía hablar con él personalmente para investigar.
Una vez más queda registrado el abuso de autoridad en la ciudad y lo que más resaltan en algunos comentarios que vi en la página de Facebook de Q’hubo fue que “algo tuvo que hacer el aficionado para recibir esa patada”, dice un ciudadano.
¡Qué descaro!, esos mismos son los que a través del BB envían mensajes de que vayamos a una fiesta en la que Sigifredo nos guiará el camino.
Cuando la justicia acusa a alguien sin pruebas contundentes, el mundo solo se escuda en decir que es presunto responsable, sin saber el daño que se les hace a las personas y familiares.
Ahora, será que el General ¿será capaz de salir a decir en público el nombre del policía, aunque tiene pruebas contundentes? A ese policía lo acusarán a escondidas y por el Blackberry seguiremos hablando de Sigifredo, aunque ya casi queda en libertad.   

viernes, 25 de mayo de 2012

La bola rápida del alcalde

La bola rápida del alcalde

¿Qué fue a hacer el alcalde Campo a Miami?, bueno, antes del viaje dijo que "era algo histórico" que un alcalde  de Colombia lanzara una bola en un juego de las Grandes Ligas y es cierto, cumplió: unas dos horas antes del partido entre los Marlins de Miami y Los Rockies de Colorado, se paró en la lomita, vestido de saco se puso el guante en su mano izquierda, miró fijamente al receptor John Buck, de Miami, y luego de estirar su pierna derecha, sacó el lanzamiento histórico, ese en el que no importa si es strike, bola o si llega o no a la manilla del catcher. Sólo importaba lanzar y hacer historia como él había dicho... y cumplió... y de ñapa narró el turno de un bateador, al lado del narrador Felo Ramírez, uno de los más escuchados en Estados Unidos.
Pero... ¿qué más fue a hacer el alcalde Campo a Miami?, bueno, antes del viaje dijo que iba a conseguir 2 máquinas de bomberos en la ciudad de Coral Gables, que vendrían a optimizar la prestación de este servicio en caso de presentarse conflagraciones en esta capital. 
Ya de regreso en la ciudad que gobierna dijo: “Yo fui para conseguir una donación para Cartagena, pero en estos momentos no hay disponibles unas máquinas que puedan traerse a la ciudad y que tengan una vida útil por largo tiempo”. Entonces, por ahora no llegan las máquinas pero según él, consiguió el apoyo para que técnicos preparen al personal del Cuerpo de Bomberos y a quienes prestan el servicio de seguridad en las playas de Cartagena de Indias.
Como una bola rápida viajó, él hizo strike y los bomberos por ahora quedaron out. Y en Cartagena, los árbitros o como se llaman en el béisbol umpire (concejales) le siguen dando la base por bola o que lo diga el mismo concejal David Múnera, quien aseguró que la solicitud realizada por el alcalde al concejo, señalaba un intercambio comercial y no el lanzamiento de una bola en un partido de Grandes Ligas.

Ayer hablé de fútbol, hoy, de política, mañana espero que Dania no se meta entre mis letras. Mejor regreso el lunes.

jueves, 24 de mayo de 2012

Real Cartagena, dame esos 5

Real Cartagena, dame esos 5

Si perder 5 a 0 es humillante y bochornoso, qué calificativos le añadiríamos al conocer que se perdió en nuestra misma casa y peor aún, con el rival al que siempre le quieres ganar: Junior.
Bueno, ¿será que la derrota es menos dolorosa porque se jugó por Copa (torneo que casi pasa desapercibido) y no por Liga?. 
El redactor de deportes de Q'hubo sugirió un título el día antes de ese duelo: REAL, A SEGUIR ENTONADO. El equipo auriverde sólo venía de un triunfo de local ante el Huila y de un empate en Bogotá  con La Equidad por la Liga. 
Real no estaba entonado, pues le pasó como al que casi no toma, estaba borracho con apenas trago y medio que se había tomado. Y así llegó a jugar contra Junior, como si estuviera en una parranda, con ánimo pero inconsciente.
Junior: sobrio, inteligente y admirable se burló, como cuando a un borracho lo rapan con una maquinita sin que se dé cuenta, eso le hizo al Real, a quien no le importó que Jairo Baldiris, amigo mío, sacara 10 mil pesos de su bolsillo para pagar la boleta. "Uno viene al estadio dizque a desestresarse pero termina uno más estresado", me dijo Jairo mientras Junior celebraba el quinto gol en una noche cálida.
Y así está el Real, borracho. Tanto en la Liga y en la Copa, esa que se nota que se la toma toda, pero no en serio. 
Vanemerack pidió esos jugadores, no le sirvieron y se fue. Llegó Basílico, a quien empieza a recordársele sólo por la goleada 0-5 que recibió contra Santa Fe y ahora este 5-0 frente a Junior. Él ya piensa en sacar a varios y traer a otros para el próximo campeonato, pero ojo, se viene Nacional, así que el domingo se podría armar otra rumba en el Jaime Morón. Pero, ¿será que hay tiempo para que al borracho se le pase el guayabo? de lo contrario podríamos estar dándole los 5 a un Borracho, sí, con B grande. 

Te quiero Real.